No hay fin de fiesta sin pirotecnia. Aunque de manera simbólica, como el resto de los actos de este 2021, las fiestas en honor a la Mare de Déu de Loreto pusieron su broche final con el disparo de una tronà de colores.
No fue el tradicional castillo de fuegos artificiales, pero durante cerca de seis minutos, la playa de la Grava volvió acoger el sonido, el color y el olor a pólvora con el fin de conmemorar el 125 aniversario de estas fiestas.