El Ayuntamiento de Jávea no descansa en su empeño por impedir que el faro situado en el Cabo de San Antonio se convierta en un hotel según la intención demostrada por Puertos del Estado. Una actuación realizada de forma completamente diferente a la que habitualmente se lleva a cabo en la adjudicación y consecución de proyectos de este calibre y que, en ningún momento, ha contado con la opinión del consistorio de Jávea como máxima autoridad administrativa del municipio donde se ubica el faro.
Por eso, el Ayuntamiento de Jávea ha realizado diferentes informes técnicos con alegaciones contra el proyecto y que, según ha avanzado el alcalde, José Chulvi, “se limitan a recoger la legislación contrarias a dicha actuación”, ha manifestado el munícipe. Estos informes atienden a consideraciones urbanísticas, de Medioambiente y Servicios, de la Policía Local y de Amjasa.
Dichas alegaciones han sido aprobadas por unanimidad por el resto de portavoces de todos los partidos políticos y el documento será ratificado en la sesión plenaria de la semana que viene y posteriormente remitido a Puertos de Alicante dentro del plazo señalado para presentar alegaciones.
Chulvi ha remarcado que, de estos cuatro informes, el que recoge las consideraciones urbanísticas “es clave” en el alegato que presenta el consistorio para desmontar, porque no acata la legislación vigente, el intento de construcción de un hotel en el faro del Cabo de San Antonio.
Así, el proyecto avalado por el Puerto de Alicante choca con cinco normativas: la Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje (LOTUP) de la Comunidad Valenciana, el Plan General de Jávea (PGOU), el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Montgó (PORN), el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural del Montgó (PRUG) y la propia Ley de Puertos del Estado y la Marina Mercante.
Terreno protegido que impide la urbanización
La normativa actual defiende la integridad como tal del faro que se encuentra en terreno calificado como “no urbanizable”, forma parte de un Parque Natural y se encuentra edificado en una zona de especial protección ecológico-paisajística que no admite ningún tipo de actividad que pueda afectar negativamente al ecosistema. Una microrreserva de flora de especial interés dada la singularidad de la misma.
Por otro lado, el faro se encuentra dentro de la zona de 100 metros medidos desde el límite interior de la ribera del mar, lo que impide cualquier tipo de nueva edificación o el aumento de tamaño de las ya existentes (el proyecto del hotel presupone la construcción de un nuevo piso sobre la casa del faro superior a los 190 metros)
Otra de las alegaciones que matiza el Ayuntamiento es que el futuro hotel, sobre el papel, no deja constancia de cómo será la depuración de las aguas ni de vertidos; máxime siendo un Parque Natural, encontrarse dentro de una Reserva Marina y situado dentro de un ecosistema único.
En materia de seguridad, Amjasa revela que el hidrante cercano al edificio no tiene suficiente presión para ser efectivo y la Policía Local recuerda que incendios como el sufrido en septiembre, dejan patente las dificultades para evacuar a las personas en esta zona.
Otras acciones llevadas a cabo
Más allá de las alegaciones que presentará el consistorio, se están encauzando otras gestiones para evitar la consecución del hotel. Así, Chulvi se reunirá mañana en Madrid con el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, quien, en un escrito, ha afirmado que se tomará “en especial consideración” la opinión del municipio de Jávea ante esta actuación.
También, el alcalde ha solicitado una reunión a la Junta Rectora del Montgó para abordar la posibilidad de convertir el faro en un Centro de Interpretación de la Reserva Marina del Cabo de San Antonio y dotar al inmueble de un uso social acorde a sus características y ubicación.
