El Restaurante Castelló es un referente en la hostelería de Xàbia. Desde que se fundó en el año 1982, el Castelló no ha dejado nunca de servir a sus clientes, ofrecer la mejor cocina autóctona y cuidar cualquier detalle. Mari Carmen Giner, más conocida como Mariana, ha estado al frente del negocio, desde 1989, "aunque tomé la gerencia hace 29 años, yo empecé a trabajar en el Castelló el mismo año que Pepe y Joaquina lo fundaron", señaló Mariana.
La que fuese gerente del Castelló, hasta hace apenas unos días, nos cuenta que el hecho de que ella dirigiera el restaurante fue por diferentes circunstancias, "yo ya trabajaba con los propietarios del Castelló en el bar que tenían en la Vall, y me apasionaba la cocina. El tío Pepe (nombra ella cariñosamente) decidió cerrar el Bar La Vall de Castelló (más conocido como Bar La Coca) y montar un restaurante en la playa", explica Mariana.
Giner señala que se vino con él y se puso a trabajar en el Castelló, "y siete años después, por circunstancias familiares de los fundadores, tomé yo las riendas y me quedé dirigiendo el restaurante. Un restaurante que fue de los primeros en instalarse en la playa", indica Mariana.
Ahora, después de casi 30 años cocinando, decide pasar a una nueva etapa y disfrutar más de la familia. "Desde hace un año que estoy pensando en tomar la decisión, y finalmente, ha llegado el momento. Mi intención era dejarlo, pero dejarlo en buenas manos", manifiesta Giner y añade que deja la gerencia del Castelló, "aunque seguiré trabajando unos años más para el nuevo propietario, ya que me apasiona mi trabajo, me apasiona cocinar, y está decisión es tomada para poder disfrutar de la familia y tener menos responsabilidades".
Mariana Giner nos explica que el nuevo propietario cambiará el nombre del restaurante, pero seguirá con la esencia del Castelló: Arroz y tapas. La ex gerente del Castelló traspasó el negocio el pasado 31 de octubre, "y el 1 de noviembre, el nuevo propietario, ya se puso manos a la obra para dar un cambio al local y abrir el nuevo negocio cuanto antes", afirmó Mariana.
Un clásico de xabía, nos da tristeza su desaparición.
Es verdad que ya no era igual, pero echaremos de menos el pollo con almendras de antes.