El Nazareno en el año 2020.
Homenaje a Dª Ramona Fernández de Palencia.
El 14 de marzo de 2020 ya se había preparado la ermita para que al día siguiente saliera la imagen de Jesús Nazareno con su madre, la Dolorosa, hacia Xàbia. Se habían puesto flores por la ermita y los cirios estaban preparados para acompañar a Jesús en este viaje anual a la villa. Pero ante la evidencia de la crisis por el coronavirus, se produjo la siguiente conversación en la oscuridad de la noche mitigada por la iluminación de una pequeña candela que resistía a apagarse.
Jesús Nazareno desde su altar se dirigió a su madre, la Dolorosa, que estaba cerca y le dijo:
- Madre, este año está difícil todo y va a haber confinamiento de todos los habitantes que están bajo nuestra protección. Y nosotros ¿Qué haremos?
- Hijo, como siempre, bajar al pueblo para bendecir a todos los habitantes.
- Pero, Madre, lo veo difícil.
- Hijo; acuérdate que en diciembre de 1834 bajaste a la villa para evitar que todos los habitantes se contagiaran del cólera y te pusieron delante de San Sebastián que es el patrón, porque tu presencia ayudaba al santo sanador y entre los dos, Xàbia venció a la enfermedad. ¿No vas a bajar ahora que te necesitan?
- Madre. He pensado estas cosas pero te diré que en 1834 la villa estaba amurallada. Muchos estaban encerrados entre las murallas y otros por los arrabales como el del Convento y el ravalet de Sant Jaume y cuando yo bajé estaba cerca de ellos y los podía proteger.
- Hijo, Pues ahora igual.
- No, Madre. No, ahora los habitantes no están encerrados entre las murallas; se extienden por todo el llano y los altozanos colindantes. ¿No crees que desde aquí, desde la ermita, podemos abarcar más territorio y que nuestra protección llegue a todos? Y no solo a los de Xàbia, pues desde aquí abarcamos también a Benitatxell y hasta a los de Gata y Pedreguer y otros de más lejos.
- Hijo. Me has convencido. Creo que desde aquí nuestra acción protectora tendrá más efecto. Cuando mañana lleguen los mayorales, les diré: Haced lo que Él os diga.
- Madre: les diré que me pongan mirando al pueblo para bendecirles y desde aquí llegue nuestra protección a todos y si ellos están encerrados en sus casas, nosotros también estamos confinados en la ermita, en la misma situación que ellos.
Al día siguiente de esta conversación, el día 15, fueron a las cinco y media de la mañana los mayorales para llevarlos al pueblo a los dos, pero desistieron de ello al ver las circunstancias y la cara que ponía Jesús Nazareno y su madre, la Dolorosa, por lo que decidieron dejarlos.
Este año de 2020 el Nazareno se ha quedado en la ermita para poner bajo su protección a todos los habitantes, los de intramuros y los de extramuros, los de Aduanas y los del Arenal, los de la Granadella y de la Plana, y a todos los de las demás partidas del término y los de las poblaciones a donde alcanza la vista.
Y desde el cielo, Dª Ramona, que tantas veces organizó la bajada, estará conforme con la decisión del Nazareno que este año, el tercer domingo de cuaresma, no bajó a Xàbia para proteger a todos los habitantes de la villa, confinado en su ermita y luchando contra el coronavirus, que a Jesús le recuerda la corona de espinas, solo que en este caso la corona es de virus, las Covid-19.
Juan Bta. Codina Bas
Gracias, Juan, por tu hermoso artículo. Un abrazo y cuidaos mucho.
Codina Bas, me ha emocionado las palabras que nos das a conocer de Jesús Nazareno y Su madre, y han acertado en la decisión. Espero que el día después de esta pandemia una Sola cofradía de mujeres y hombres organicemos un día ( domingo) de visita y devoción en el mismo monte Calvario.
José Vicente: mi deseo era paliar el posible descontento de los mayorales al no poder bajar al Nazareno y también el del pueblo de Jávea que seguro estaba desalentado ante tal hecho. Creo haberlo conseguido. Jesús Nazareno desde la ermita nos proteja a todos sin distinción y que este periodo de confinamiento sea corto ya que por la cuarentena tampoco tendrá visitas en la Ermita.
Sr. Codina, totalmente de acuerdo y acertado por su parte.