L’Arxiu Municipal de Xàbia ha sacado a la luz un hecho hasta ahora menos conocido: hace 176 años, el 21 de octubre de 1849, se produjo una ampliación significativa del antiguo cementerio de Sant Joan. En esa fecha, un tal Cristóbal Español vendió al Ayuntamiento tres fanecadas de tierra con el fin de ampliar el espacio del recinto y habilitar nuevos nichos, según documentos de aquellos años.
La historia de cementerio de San Juan
El cementerio, inaugurado en 1817 en las afueras del pueblo, respondía a la normativa higiénica y urbanística que empezaba a poner en valor la distancia entre enterramientos y núcleos urbanos. Sin embargo, según el geógrafo Pascual Madoz, en su obra de 1847 describía el recinto como «pequeño e indecente, porque sus paredes derruidas dan entrada a las zorras y otros animales inmundos, que se comen los miembros de los cadáveres insepultos: su situación tan próxima a la villa perjudica a la salud pública».
Este testimonio refleja el deterioro del recinto apenas tres décadas después de su inauguración y la urgente necesidad de ampliarlo y reforzarlo. Además, el crecimiento demográfico de Xàbia en el siglo XIX y las epidemias de cólera que afectaron a la Marina Alta durante esa centuria agravaron la presión sobre los espacios funerarios.
Por tanto, la compra de las tres fanecadas por parte del Ayuntamiento supuso una respuesta directa a una necesidad de ampliación del espacio funerario y a las preocupaciones sanitarias de la época.
Obras de ampliación
Los estudios arqueológicos llevados a cabo en la zona —especialmente en la Ermita de Sant Joan, que ejercía como capilla funeraria, muestran que tras 1849 se construyeron los primeros grupos de nichos sobre la pared oeste del recinto. Asimismo, los vestigios hallados demuestran que la gran mayoría de las inhumaciones anteriores —entre 1817 y 1849— se hacían directamente en tierra, y solo con esta ampliación comenzaron a habilitarse nichos para acomodar a una población que crecía.
A pesar de la ampliación de 1849, el recinto siguió siendo objeto de críticas por su proximidad al casco urbano y por las condiciones que presentaba. Finalmente, en los años ochenta (1989) se decidió la construcción de un nuevo cementerio en el Camí del Cementeri. Así, el antiguo cementerio quedó clausurado como equipamiento funerario activo.
Hallazgos en las excavaciones en 2010
Durante las excavaciones arqueológicas realizadas en 2010 se localizaron unas 30 tumbas datadas entre 1817 y 1849, muchas de ellas inhumaciones en tierra sin ataúd, lo que confirma las prácticas funerarias previas a la expansión.
La orientación de las tumbas (este-oeste) y la reutilización de algunos espacios evidencian un uso intensivo del terreno antes de la ampliación.
En el mismo proceso de investigación se hallaron fragmentos de losas funerarias cerámicas o ‘plafones’, decoradas con motivos religiosos, que fueron posteriormente restauradas por el Museu de Xàbia en 2018. Estos elementos aportan una valiosa información sobre la estética funeraria y las creencias populares del siglo XIX.
Los historiadores locales también apuntan que la ampliación de 1849 permitió por primera vez la construcción de nichos familiares, un cambio sustancial frente al sistema previo de sepulturas comunes.
En la actualidad
Hoy, el antiguo recinto se conserva como espacio de memoria colectiva, como testigo silencioso de la evolución urbana y sanitaria de Xàbia, y constituye un patrimonio histórico relevante para comprender la forma en que se moría y se enterraba en el siglo XIX.
Bibliografía
- Arxiu Municipal de Xàbia
- MARQ – Museu Arqueològic Provincial d’Alacant
- Amics del Museu de Xàbia









Me llama la atencion algo en el manuscrito de compraventa. Aparece el dato de la conversion monetaria de Reales de vellón (moneda utilizada en aquella época) en pesetas (Ptas.), cuando la peseta no se incorporó al sistema monetario de España hasta 1868, casi veinte años después….??