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El Ayuntamiento de Jávea realiza una nueva ordenanza a fin de preservar la seguridad y la convivencia ciudadana

13 de diciembre de 2014 - 00:00

El Ayuntamiento de Jávea, desde los departamentos de Seguridad Ciudadana, Servicios y con las aportaciones realizadas  por los consejos asesores de Urbanismo y Agrario; ha realizado una nueva ordenanza municipal de convivencia y seguridad ciudadana que pretende sustituir a la que, hasta ahora, se encontraba vigente y que data de 1953.

La propuesta actualiza, modifica y adapta los artículos de la antigua ordenanza a los tiempos que vivimos a día de hoy y contempla nuevas realidades para así poder responder -dentro de la legalidad- ante problemáticas como el ruido por botellón, el abandono de parcelas, vehículos o animales, el civismo y decoro en los lugares públicos, la venta ambulante no autorizada, el incumplimiento de la bandeja roja en las playas y un largo etcétera.

Se trata de un instrumento que busca amparar el uso del espacio público “como un lugar de convivencia y civismo en el que puedan desarrollarse con plena libertad las actividades ciudadanas que respeten la dignidad y los derechos de los demás”, ha explicado el alcalde de Jávea, José Chulvi.

La nueva ordenanza municipal prevé sustituir a la de 1953

José Antonio Monfort, inspector de la Policía Local, ha  asegurado que si la propuesta es aprobada por el pleno, “permitirá agilizar los mecanismos y facilitará la respuesta ante supuestos casos que la actual ordenación no contemplaba”. Una vez presentada al resto de concejales, se abrirá durante un mes un plazo de alegaciones en el que se recogerán todos aquellos requerimientos y sugerencias que la corporación valore para lograr un documento final de calidad y coherencia.

Los 189 artículos de la ordenanza limitan acciones que atentan contra la dignidad de las personas o suponen degradación visual del entorno urbano -como las pintadas, pancartas, carteles y folletos en lugares públicos- También busca regular actividades como las apuestas, la mendicidad intrusiva, el ofrecimiento y la demanda de servicios sexuales, la realización de necesidades fisiológicas, los ruidos que puedan molestar, el consumo de bebidas alcohólicas en la calle, el comercio ambulante no autorizado, las actitudes vandálicas contra el mobiliario urbano, las obligaciones a la hora de organizar actos públicos y demás conductas que pueden perturbar la convivencia ciudadana.

Otro apartado trata la limpieza de las zonas públicas y la recogida de residuos urbanos así como las sanciones e intervenciones específicas correspondientes a cada una de ellas. Otros regulan la limpieza en edificios, solares y parcelas rústicas, el uso y disfrute de las playas y zonas costeras y la tenencia de animales de compañía y sus límites en las zonas públicas.

1 Comentario
  1. Milagros dice:

    Espero que esta sea la ocasión para controlar los residuos biologicos «cacas» de perros que algunos dueños de los mismos dejan sin recoger en las aceras y otros lugares de paseo. Esta falta respeto al entorno y los ciudadanos de a pié hace que los peatones tengamos que ir atentos a lo que pisamos en lugar de contemplar y disfrutar nuestro entorno.


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