El pasado jueves 19 de diciembre el Ayuntamiento de Jávea celebraba la última sesión plenaria del año, un pleno que transcurrió rápido y tranquilo. No obstante, la edil de cultura y educación Empar Bolufer presentó una moción por la que se pedía que el Ayuntamiento de Jávea exigiera, entre otras cosas, que se anule la supresión de la línea infantil del Colegio Público Graüll. La moción recogía los siguientes datos, para el curso 2014-2015 hay 212 menores registrados que con esta cambio tendrán que repartirse en ocho unidades por lo que las aulas podrán acoger hasta más de 30 alumnos.
Tal y como afirma la moción, este cambio "perjudica gravemente la atención educativa a nuestros niños y niñas que se encontrarán con aulas con una superficie menor a la necesaria (dos metros cuadrados para aulas de infantil), comporta la eliminación de docentes por lo que se dificultan los proyectos educativos y la mejora del aprendizaje" . La moción también presentaba la petición de que se amplíe el plazo por el que los centros pueden presentar sus alegaciones al arreglo escolar ya que para ello es necesario reunir al Consejo Escolar del Centro para presentar las propuestas y después presentar el Consejo Escolar Municipal en un plazo que va del 17 de diciembre al 2 de enero cuando los centros están en plenas vacaciones navideñas.
El Partido Popular de Jávea fue el único que presentó su abstención a la moción que exige además que las aulas de los alumnos de infantil sean como máximo de 20 niños y niñas y de 25 para los alumnos de primaria con el fin de que se consiga el trato adecuado a los alumnos y que los centros dispongan del personal docente necesario. También se exigía en la moción la necesidad de que todos los centros dispongan de aulas en condiciones, gimnasio, comedores adecuados y estructuras estables que no pongan en peligro la seguridad de los alumnos.
