Pepa Guardiola vuelve a contar cuentos a la luz del riurau

A ritmo de dolçaina y tabalet continuaron ayer por la tarde los actos culturales conmemorativos del 9 d’octubre en la que los protagonistas fueron los Contes de Riurau de la escritora local Pepa Guardiola y las ilustraciones del mismo de Ximo Gascón que se encuentran expuestas en la Casa de los Lambert en la calle Mayor.

A la lumbre del Gran Riurau de los Arnauda, que tantas y tantas historias habrá escuchado y atesorado, una multitud de familiares, amigos y curiosos se acercaron para arropar a la escritora. En un ambiente mágico, de luz cálida y aprovechando los últimos vestigios del verano, el público pudo conocer las motivaciones detrás de la reedición, 25 años después, de los cuentos que sirvieron de trampolín a Pepa Guardiola para lanzarse al maravilloso mundo de la literatura.

Guardiola se mostró emocionada y agradecida en todo momento. A los que lo hicieron posible en su momento y a los que lo han logrado ahora. Comentó que ella no se había planteado en ningún momento una reedición de sus Contes de Riurau. Creía que su contenido podría estar obsoleto pese a que a los niños y niñas todavía quedaban prendados cuando un misterioso monstruo se acercaba a Marieta en Marieta i la granota. Animada por Paquitus, quien la felicitó hace un año por el aniversario de la publicación y que ya participó en la primera edición, a la escritora le picó el gusanillo de volver contar cuentos en el riurau.

“Consulté con Edicions 96 si era más conveniente reeditar el original o crear un nuevo libro. La curiosidad de volver a ver Contes de Riurau con un nuevo rostro, nos animó a crear una nueva edición digitalizando el texto e incluyendo unas maravillosas ilustraciones de Ximo Gascón”, contó Guardiola.

Para la responsable de Edicions 96, la publicación de la obra “ha sido difícil y costosa pero un placer en todos los sentidos”. Ilusionado también se mostró el ilustrador de la misma quien comentó “lo fácil que es trazar una obra de Pepa que hace que a uno se le dispare la imaginación”. Además, explicó que cada uno de los dibujos está realizado “con la compleja técnica del aguafuerte que aporta una sensación de grabado”.

El acto finalizó con una divertida representación coral del cuento Perot el Negrot a cargo de un grupo de amigos entre los que se encontraban Pere Segarra y el concejal de turismo, Antonio Miragall. Y como no, al calor del riurau, la velada terminó con pasas, almendras y mistela y con un deseo: transmitir a las generaciones actuales y futuras las historias costumbristas tan nuestras que narraban nuestros padres y abuelos.

I conte contat, conte acabat.