El refranero español tan rico y amplio viene al pelo cuando dice, “nunca llueve al gusto de todos”. No es que la lluvia haya caído mucho por estos lares, pero si que el aspecto de la placeta Maruja Varó ha desatado una pequeña tormenta entre los vecinos de Duanes de la Mar.
De reciente estreno, este espacio en el que predomina el hormigón y la escasa vegetación no ha gustado a un grupo de vecinos que han recogido firmas para pedirle al consistorio que tenga a bien una redefinición del espacio. Unas peticiones que han hecho llegar al alcalde, José Chulvi mediante un escrito con 12 peticiones.
Los vecinos apuestan por una placeta más amable no tan fría, con arboles que den sombra. Una zona más verde dado su enclave en un barrio típico portuario, instan a remodelarla sin tener que derrumbar lo que ya está hecho. Se pide la instalación de una pergola con plantas trepadoras para que ellas misma den la sombra de la que la zona carece con su actual aspecto.
Se apuesta por una lamina de agua que de frescor cuando el calor apriete y sobre todo que se instalen referencias a la historia del puerto y del barrio, bancos y rincones que resulten amenos para la gente mayor que puedan hacer uso de ella.
El solar del “antic quartell dels carabineros” estuvo vallado durante casi ocho años desde que las ruinas del edificio fueran derruidas en el año 2007. Tras descartar construir un nuevo inmueble, el consistorio propuso crear en este lugar, junto al paseo de la playa de La Grava, un espacio de uso público con mobiliario y arbolado. Una idea que fue respaldada socialmente como uno de los proyectos elegidos dentro de los presupuestos participativos
El problema es que no se ha diseñado pensando en la gente, si se pensara mas en la gente se diseñaria los bancos y asientos mas agradables y comodos para los usuarios, la verdad que no invita a ir y pasar la tarde alli, los espacios publicos hace tiempo que se diseñan sin pensar en la comodida de la gente y ni de las personas. Pero aqui los responsable son los diseñadores o los arquitectos municipales que creo no piensan en la gente para hacer sus diseños.
Aunque yo no soy vecina de Aduanas del Mar, cuando vi las fotos de la nueva plaza me pareció espantosamente fea e incómoda. Ni una plantita, los bancos, sin respaldo y horrorosos, ya que se ha puesto de modo hacer unos mamotretos cuadrados de hormigón o similares, en los que, si te sientas en invierno, se te queda el trasero helado y si lo haces en verano, puedes hacerte ampollas en la misma parte. Una birria de plaza, y lo siento, ya que podía haber sido muy bonita.