El festival de fin de curso del CEIP Graüll se llevó a cabo el pasado viernes 2 de junio, marcando el punto culminante de un proyecto realizado durante todo el año escolar bajo el lema «Un món de colors» (Un mundo de colores), donde los estudiantes fueron los verdaderos protagonistas.
Con el objetivo de crear conciencia y promover prácticas sostenibles en toda la comunidad educativa, se disfrutó de una espectacular fiesta enfocada especialmente en la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.
El escenario se transformó en un auténtico decorado ecológico, donde cada rincón estaba dedicado a una temática relacionada con el medio ambiente. Los alumnos de sexto grado, en el papel de activistas, se encargaron de dar color al planeta y presentar y conducir todo el evento.
Los niños y niñas de infantil, segundo y cuarto grado representaron los seres vivos que nos rodean. Las actuaciones teatrales y musicales reivindicaron la importancia de la conservación de los bosques y la concienciación sobre el cambio climático.
El proyecto y el festival lograron el objetivo de dejar huella entre los estudiantes y, desde el centro, esperan haberla dejado también en la conciencia colectiva del público asistente sobre la necesidad de proteger el planeta. «Con estas grandes acciones, esperamos haber sembrado una semilla de amor y cuidado hacia nuestra Madre Tierra», aseguran.
