Cuando de Jávea me iba, volví. Porque conforme me alejaba, me dije: “Jávea, quiero vivir aquí donde la paz y el amor no se acaban nunca”.
Durmiendo me desvelo soñando con tus amaneceres, con el agua cristalina y pura de tus calas, de tu Bahía y me llenan mi vida d esperanza. Todo tu entorno me hechiza me llenan mi vida de esperanza y dulzura celestial.
Jávea me place, me tranquiliza, me recauchuta, y también me invita a una esperanza eterna. Todo tu entorno me hipnotiza y cuando estoy ausente mi vida se altera y me presiona la melancolía que me inunda de tristeza inexplicable. Necesito vivir en tu presencia y la recrearme de tus maravillas para llenar mi corazón de efluvios de alegría y gozo, porque todo tu embrujo me deleita, rejuvenece, me atrae y me fascina.
A mi querida Jávea vuelvo, voy. En mi querida Jávea quiero vivir y morir, ayer, hoy y mañana. Recuerdo cuando te vi por primera vez, y cómo un flechazo de amor penetró en mi espíritu y me enamoré locamente de ti. Si me pierdo, si pierdo la brújula y la memoria y no sé donde estoy, reclámame y compadécete de mí.
Hoy he vuelto a verte mi Jávea querida. Me insuflas vida, vida en abundancia. Vida añeja y moderna. Vida de paz, de amor. Si vivo lejos de ti la muerte se me acelera. Cuando me alejo de ti se me acentúa la añoranza y se entristece mi corazón, acompañado de dolor y opresión, y sus estertores cardiacos me comunican, que no es recomendable que me separe nuca de tu lado, porque empeoraría mi debilidad cardiaca.
El sentimiento de amor que siento por ti es tan profundo que me avisa y me convida a regresar a tu regazo, a tu acogida, a tu hospedaje amable, solidario, de ternura y de luminosidad espiritual. Por eso, cuando inicié la marcha para separarme, cuando me iba, volví.
Volví, regresé, y me dije: “me quedo”. Aquí está mi hogar, mi ilusión y todo lo que necesito para ser feliz. Ya se terminó el dilema de vivir sin Ti. Se acabaron las penas, las dudas. Si tú me das felicidad, ¿por qué tengo que alejarme de Ti? No estoy dispuesto a permitir que tu añoranza por la lejanía me queme el corazón y todos los demás sentidos de mi añejo cuerpo. Si lejos de Ti siento miedo, tristeza, dolor y me ahoga la nostalgia, ¿cómo resuelvo el problema? Me quedo y me abrazo como un fiel y enloquecido enamorado que jamás te olvida. Sentado en mi vieja y carcomida roca de mi amada playa de la Grava, mientras el sol despunta en un luminoso amanecer por el Cabo de San Antonio, me solazo y mi espíritu siente que se eleva al cielo conducido por una estrella del ángel bondadoso que me guía hacia la gloria. Mi sueño se cumple: “de Jávea a la Gloria”.
Por eso, cuando de Jávea me iba, volví. ¡Hasta la muerte!
Primo…lo tuyo con Javea no tiene nombre… y mas siendo tu murciano…amas mas a Javea que algunos javienses…Gracias y un abrazo
Yo también me solidarizo contigo. Llevo 63 años viniendo a Jávea. Como ha cambiado pero sigue teniendo su encanto que hechiza.
No puede expresarse mejor lo que siento por Javea. Es llegar allí y sentir la alegría, el regocijo y el hormigueo de la primera vez.
La intensidad de su luz, la paz y tranquilidad que allí siento y la tristeza y desgarro cada vez que me voy
Jávea,te atrapa,es tan bonito que nunca te cansas de mirarlo,ese mar,una maravilla,si pudiese me volvía a vivir allí,
Excelente excelente
En el «Libro de mi querida Sabía» se ecuentran muchas más referencias y alabanzas de Jávea
Precioso!. Acabo de volver de unas mini vacaciones de una semana en Jávea, y aunque soy de Valencia y tengo el paraíso tan cerca, siempre vuelvo llorando, mi amada Jávea, la calma de todos mis males,a los pies del Montgó sueño siempre hasta pronto mi tesoro❤️.
Conocí Javea en 1962 y estoy completamente de acuerdo con este bonito relato. Yo también tengo mi roca en la playa de la Grava. Desde entonces he ido casi todos los años a veranear.
Es curioso, si leyéramos este artículo de otro sitio pensaríamos en pedante, ñoño, provinciano. Pero con Javea no pasa. Y no pasa porque sentimos esa misma esencia que el autor, podremos cambiar las palabras pero dentro sentimos lo mismo. Aprendí a bucear en la cala blanca hace 42 años, subí incontables veces al montgó, presencié tormentas electricas en Agosto, inundaciones e incendios. Cuando paseo y llego hasta el cap Prim pienso esta es mi tierra. Aquí es donde vivo, en Valencia (que la amo tb ) en realidad sobrevivo.
Nunca se podría haber hecho una descripción tan acorde con mis sentimientos hacia mi querida Jávea
Es maravilloso como describes tu sentimiento por Jávea, lo comparto.
Precioso.
Precioso, lo comparto
Nunca se podría haber hecho una descripción tan acorde con mis sentimientos hacia mi querida Jávea. Enhorabuena