David Ferrer perdió en la Copa de Maestros ante el checo Tomas Berdych por 6-4 y 6-4, en una hora y 23 minutos, y se quedó sin opciones de continuar adelante en el torneo.
El checo le atormento al servicio y fue un muro infranqueable que devolvía cualquier golpe cuando el javiense llevaba la iniciativa, y terminó cerrandole definitivamente las puertas de la semifina.
Ferrer volvió a tropezar con la misma piedra que ya le tumbó en 2011 en este mismo escenario. Berdych solo le ha ganado al javiense en dos ocasiones sobre pista dura, ambas en el tapete azul del O2 Arena.
Cuando el de Jávea saltó a la pista parecía haber renovado sus energías. Se llevó el primer juego en blanco y trataba de hacer valer sus puntos fuertes ante un Berdych que no se dejaba amedrentar con facilidad. David Ferrer transmitió buenas sensaciones con algún golpe brillante. Pero Berdych al saque le dejo pocas opciones y el primer set pronto se hizo inmanejable para Ferrer, que defendió tres bolas de ruptura y cayó finalmente a la cuarta.
El jugador de Jávea cedió el primer set, pero mantuvo la confianza de volver a remontar en los dos siguientes, como ya hizo hace cinco días en los cuartos de final de París Bercy, cuando el checo se llevó el primer parcial (6-4) y obligó a Ferrer a remar contracorriente para remontar el duelo (7-5 y 6-3 en los dos últimos).
David Ferrer aguantó durante más de media hora en el segundo parcial hasta el 4-4, el punto de inflexión de ese segundo set, cuando Berdych logró imponerse al resto y puso el partido definitivamente fuera del alcance del jugador de Jávea.
