Los empresarios y comerciantes de Xàbia califican de «desastrosa» y «grandes pérdidas» la crisis del coronavirus
Con la llegada de la Semana Santa se puede decir que se inicia la buena temporada para la hostelería, son días que se alargan a meses en los que la gente sale, disfruta de las terrazas, del buen tiempo y de las amistades. Esta Semana Santa es diferente en todos los sentidos.
Los representantes de las asociaciones de empresarios y comerciantes de Xàbia valoran esta crisis sanitaria como un "desastre", una situación que conlleva a "pérdidas enormes". Y es que, el sector de la hostelería es uno de los más castigados por las medidas sanitarias decretadas para frenar el coronavirus.
La presidenta de la Asociación de Xàbia Port, Cande Ros, ha indicado que en hostelería, "estos días son los que estamos al 100%. La Semana Santa es una de las mejores temporadas con la que se da inicio al trabajo hasta septiembre. Después del invierno duro que hemos pasado esperábamos esta temporada con ganas y encontrarnos con esto es muy complicado".
"Además, saber que vamos a ser los últimos en poder abrir, aunque sin saber aún cuándo y con qué medidas hace que veamos más difícil la situación, pero desde los asociados del puerto, estamos animados y concienciados en luchar por salir adelante", explica Ros.
En general, los hosteleros creen que como pronto no se retomará la normalidad hasta el mes de junio, "lo que da plazo a arrancar pero no a obtener beneficios", indica Alfonso Pinel, presidente de la Asociación de Comerciantes y empresarios del Arenal, quien añade que esta Semana Santa es de "pérdidas total. Se deben afrontar gastos con 0 ingresos".
Por su parte, el presidente de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Xàbia Histórica, Raúl Caselles, coincide con Cande en que la situación es "desastrosa". "En estos días teníamos nuestro momento de llenar con el mercado de pascua y demás actividades, pero al final, el pequeño comercio es el que sale perjudicado y se lo llevan las grandes superficies". Caselles manifiesta que los empresarios están decaídos porque aún estando cerrados los gastos son los mismos y se hace difícil sobrellevar la situación.
Desde los empresarios del Arenal califican el impacto del coronavirus como una situación "terrible". "No sé cómo vamos a sobrevivir de esta crisis; vamos a ver como será el verano, esperamos que se nos dé oxígeno para poder afrontar un poco mejor la situación y resistir y no tener que echar el cierre", afirma Pinel.
El presidente de la Asociación del Arenal asevera que "desde el colectivo estamos preocupados, somos conscientes de que la vuelta a la normalidad va a ser lenta y el turismo extranjero lo hemos perdido". "Varios empresarios habían hecho mejoras en el local y se han encontrado con la temporada perdida", añade Alfonso Pinel.
Jose Manuel Piña, presidente de la Asociación de Restauradores de Xàbia (ARX), coincide en la incertidumbre que genera a cada uno de los propietarios de restaurantes esta situación, "es fastidiosa. No sabemos cuando terminará el confinamiento, cómo se van a distribuir los espacios, qué medidas se pondrán desde Sanidad a la hora de abrir o cómo repercute el ERTE. Todo son dudas que nos llevan a ver una situación complicada hasta que se conozcan las medidas del gobierno".
Piña ha destacado que por el momento, con la vuelta a la normalidad "hay que basarse en el turismo local y nacional, no podemos contar con el extranjero".
Reunión con el alcalde
Del encuentro telemático con el alcalde, los representantes de las asociaciones han manifestado estar contentos con las medidas en las que está trabajando el Ayuntamiento, "nos ha trasladado un paquete de ayudas que harán ver la luz a los empresarios, ya que serán ayudas directas a cada comerciante estudiando cada caso personalmente".
Pinel indica que las medidas trasladadas por el alcalde son expectantes "nos transmitió mucho apoyo y energía y esperamos que se haga una campaña fuerte de cara al invierno dirigida a las personas locales y de segunda residencia".
José Manuel Piña y Cande Ros, por su parte, han indicado que con las nuevas ayudas y con la eliminación de las tasas ya anunciadas aportan un respiro a los propietarios de los restaurantes, "los cuales muchos de ellos deben seguir haciendo frente, por ejemplo, al pago del alquiler del local".
