En Calpe, la Guardia Civil ha detenido a un argelino de 31 años de edad como el presunto autor de un delito de robo con fuerza en el interior de una vivienda. El individuo llamó la atención de los agentes, ya que se encontraba en actitud sospechosa y vigilante, en las inmediaciones de un edificio de la Avda. Gibraltar, ocupado mayoritariamente por turistas extranjeros.
La Guardia Civil decidió identificarle y, tras hacer las comprobaciones pertinentes, verificaron que le constaba una orden de detención por ser el supuesto autor material de un delito de robo en una vivienda de Santa Pola, cometido el pasado 18 de mayo de este año, donde forzó la ventana del inmueble y sustrajo de su interior varios aparatos electrónicos.
Asimismo, los agentes pudieron comprobar in situ, en el momento de su identificación, que en el interior del vehículo de esta persona había diversas prendas de vestir y gorras, posiblemente utilizadas por el individuo, una vez cometidos los robos, con la finalidad de despistar a los agentes o posibles testigos, cambiándose rápidamente de indumentaria, dificultando así su identificación o localización.
El detenido ha quedado en libertad con cargos, a la espera de juicio. Además, se le ha abierto un expediente de expulsión del territorio nacional, por encontrarse residiendo en España en situación irregular.
Cada vez entiendo menos las leyes españolas. Este argelino, ilegal, con una orden de detención y al que cogen en una actitud sospechosa -es decir, que iba a volver a robar en otra casa- y el juez, en vez de meterle en la cárcel hasta que se celebre el juicio, le deja en libertad para que se pueda fugar tranquilamente. ¿Pero esto que es?